Querer escribirte

Una vez escribimos un cuento
Sin hacer uso de las letras,
Solo un susurro tenue en el viento,
Dos niños para el paraíso y el infierno.

El cielo nocturno y el sol tuvieron una orgia
Después de leer nuestras historias
Sobre el abismo más tierno de los recuerdos,
Emociones rápidas y sentimientos lentos.

Caminamos de la mano con los cuerpos
Sin manchas de las tintas,
De esas que cubren la desnudes,
Con una capa que cubría
Aquel rubor sobre tu rostro pecoso.

Soy el complemento de aquella hembra,
Soy su polo magnético opuesto para atraerla,
Con palabras que destruían la realidad,
Los limites que encadenan nuestras almas.

Somos dos piezas únicas que encajan,
Como mis poemas y tu sonrisa,
Como el sexo entre nuestros cuerpos,
Somos huellas en las playas del tiempo
Y una constelación de dos astros eternos.