Botas descansan al lado de la sombra

Un fétido secreto ilumina el cuenco seco,
un cántico ferviente disemina el pregón,
vierte el residuo
en el fermentado dilema de querer y olvidar,
La fe se percibe en la lágrima,
en la guerra futura,
en la sustancia del deseo,
en la necesidad intrínseca,
en esa misteriosa luna,
reflejo de toda la verdad.

Descansa entonces,
en la pereza,
en el desarraigo,
en la maraña invisible,
en la cuita y la culpa,
en una teja que cae,
en otra que recibe la lluvia,
el tiempo, el polvo,
la duda.

Sube y mira el sol en el horizonte,
reza y pide por la vida,
ora y siente el manubrio de la creación en los hombros...

Y llora.

Bebe de la luz.

Comentarios & Opiniones

Xio

Estupendo, profundo decir, siempre una muestra de ese indiscutible talento que te adorna, un placer la visita, abrazos sinceros David, feliz tarde.

Critica: 
Centinela Azul

Gracias hermosa dama, siempre ud. tan atenta y detallista.

Critica: