"Follando a Alejandra" de Josep. "Bestia", de Daih.

Follando a Alejandra
En este maldito inicio de invierno donde la niebla pretende reinar sobre los barrios y una fina lluvia cala a la ciudad por entero; ahí, en este escenario, regresas de tu trabajo en uno de lo viejos tranvías que los veranos lucen para pasear a turistas vestidos con camisetas amarillas y blusas de muchos colores. Hacia tu casa que es un estancia sola, al final de una calle, entre árboles que crecieron demasiado. La noche se acaba de echar encima en el tránsito de veinticinco minutos del tranvía, el cual te desemboca en la parada que hay frente a la Iglesia de Santa Águeda. Mas tú tomas el camino de regreso para girar una cuadra después hacia la izquierda. La acera de la calle se transforma en cemento y el agua que lo discurre refleja unas luces de las farolas que se mueven temblando. Escuchas pasos justo detrás de ti. Tan fuerte ese taconeo extraño como el tuyo. Aceleras pero quien te viene también lo hace. Avisarías marcando un número que llegarás tarde a casa si hubiese alguien a quien avisar. Cuando pasas ante la vieja puerta de hierro que guarda a un taller mecánico abandonado, te empujan violentamente contra ella. De tal modo, que la puerta cede y quien te tiene agarrada por los brazos y te empuja, te lleva hasta la pared delantera del mismo taller. Te aplasta en ella y te susurra que ni se te ocurra volver la cabeza. Y junto al vicio que contiene su voz átona sientes tus senos como se hieren en la pared encalada, fría y que te los moja a través de la suave blusa. Te sube la falda, obliga a que te pongas a cuatro patas al presionar en tu pescuezo. Tus medias se rompen por las rodillas que raspan el suelo de tierra. Y penetra un pene grande y duro en tu sexo al descubierto. Frota las paredes de tu vagina, empicha ese clítoris de 1,2 que tienes y que pocos amantes conocen de sus deseos extremos. Se follan como un baile en la noche. Luego el pene se retira con la suavidad de una caricia doble por tus paredes mojadas. Surge de tu sexo, se emparra hasta alcanzar el orificio de tu ano que la excitación ensancha. Y penetra en él como vil gusano, adentro. Suelta su rocío caliente, se introduce como veneno. La penetración vuelve sobre sus pasos, deja el ano latiendo de éxtasis y desciende de nuevo para cobijar, medrar, dominar y someter tu vagina, su punto más hondo, su agujero donde eyacular como si la polla del forastero se desvaneciera en esencia líquida. Gimes con tus labios pegados a la pared, donde se hieren. La misma voz tan sucia te dice muy queda:
-No te des la vuelta. Tiembla con ésas tus piernas por la que se resbalan líquidos y lascivia tuyos y míos.
Entonces sientes que te bajan la falda. Y los pasos de ruidosos tacones (como los tuyos) se alejan. Cuando la puerta que da a la calle chirría al cerrarse te giras, ya para no ver nada. La punta de la lengua limpia tus labios de los hilillos de sangre.
-Me han violado!! Como siempre deseé!! Del modo que soñaba... ¿Quién podía saberlo?
Tu regreso a casa es un lago de muy hondo placer y un mar de dudas.
Josep (Joanna)

Bestia, (Respuesta a "Follando a Alejandra" de Joanna Dufromont), por Daih
Corro.
Frenéticamente.
Corro
Mis labios gotean sangre
Mis labios aun hinchados
arden.
Corro
y la oscuridad se hace más eterna.
En un sentido primigenio
el último farol encendido
estalla bajo la mirada de fuego.
Me detengo…
Un gruñido desde las profundidades
como ese temblor subterráneo que vaticina holocausto.
La sangre hierve en cada vena
y cada poro muestra en negro del infinito.
una fuerza inexplicable
un jadeo
y el sabor de la sangre en mis labios
enciende el instinto primitivo.
Mientras una fisura lunar
en su blanco incandescente
punza en la sien la agudeza del colmillo.
En la esquina gris del inconsciente
acecho para el zarpazo final.
No te imaginas
en las fauces que beberás tu último dolor.
Oigo pasos y se detienen los segundos
un aroma profundo de tu sexualidad
aun húmeda de mis viscocidades
despierta a la bestia.
Siglos de abstinencia
siglos de servilismos
siglos de fantasías vacuas.
Ven - te digo-
y quedas paralizado al magistral espectáculo de mis ojos de fiera
Entrégate al mejor de tus orgasmos.
ya no tienes ni deseas otra alternativa.
Mientras una línea roja baña la luna de neón.
(Publicado el 13 de julio de 2013)

Comentarios & Opiniones

Raidbury

Interesante concepto el de unir la prosa al verso en dos personalidades distintas,como en un juego de roles artístico.Un agradable placer descubrirle,poeta.Cordiales saludos.

Critica: 
A Cuatro Manos

Muchas gracias Raidburi, es la idea, somos dos poetas, Josep es magnífico haciendo relatos y yo, Daih, intento seguirlo con poemas. Es un experimento de trabajar a dúo y ha sido muy gratificante.

Critica: