El cuento de nunca acabar

Cuando al fin comprendes
que el final ha llegado,
cuando al fin entiendes
que ya no había nada qué hacer,
cuando crees
que algo puedes hacer,
es cuando todo ha acabado
y crees que eso tú no debes merecer.

Cuando te preguntas:
¿Por qué a ti?
Cuando piensas en los momentos
que te hizo tan feliz,
es cuando te das cuenta
que todo ha llegado a su fin.

Cuando suspiras al recordarla,
cuando quisieras el tiempo regresar,
es cuando te das cuenta
que no has dejado de adorarla
y que sin ella ya no quieres despertar.

Cuando un minuto, siquiera,
quisieras con ella estar,
cuando terminar
es lo último que quieres pensar,
cuando al caminar
por ella solías tropezar,
es cuando caes
tan profundo en la oscuridad,
que del abismo crees que nunca saldrás
y entiendes que ese anhelo
sólo te dañará más de lo que estás.

Cuando crees que te puedes levantar
y volver a caminar,
cuando entiendes
que resistir es lo único
que has podido lograr,
es cuando tienes la seguridad
de que puedes sin ella estar
y estás dispuesto a regresar
aunque lo mismo te vuelva a pasar
y todo se vuelve un cuento de nunca acabar.