Son estrellas, pero son felices

- ¿Ya viste las estrellas, Joaquín?
- Sí, ya las vi,
- ¿Qué ves?
- Simplemente estrellas.

- Eso es, son estrellas que una vez fueron testigo
y cómplices de mi amor por ella.
Estrellas que reían al ver mis nervios
y a mi poco sentido de amante.

Estrellas que cuentan lo que vieron,
aunque solo yo las escuche.
Estrellas que un día me incitaron
a seguirlas cuando yo me mezclaba
entre arena, mar y sufrimiento.
Cuando yo moría.

Y me duele, Joaquín, el estar vivo
y verlas contentas sin mí.
Me duele el saber que siguen llenas de luz,
mientras yo me hundo en el pozo más oscuro.

Y si hoy fuera un astro tan bello como ellas,
allá me vieras sonriéndote desde el cielo,
siendo feliz y seguro en su compañía
porque ellas no aman, no lastiman.