NARICITA DE MADERA

NARICITA DE MADERA

Aquí, sentado junto al mar
en esta plaza con olor a caramelo,
oteo el horizonte azul y miel
esperando cada tarde tu llegada.
Ver tu cabecita de madera aparecer,
medirte la nariz soñando que eres bueno,
abrazarte, sentirte nuevamente.
Pinocho niño, mi obra maestra
que llegaste un día para irte.
Se que el hada te protege de la noche,
te aparta de las sombras y regala luz,
pero ahora ya no eres de madera, eres niño,
por tus venas corre sangre y no serrín,
tienes vida, sentimientos, tristezas y alegrías
y con ello llegan los peligros y amenazas.
Solo sueño con taparte cada noche,
contarte un cuanto al costarte,
sentir calor al abrazarte,
y enseñarte los caminos de la vida.
Aquí, sentado junto al mar espero,
veo como van las ballenas hacia el sur,
el retorno de las aves hacia el norte,
como pasa la vida frente a mí
mientras siento como el tiempo me acorrala.
Me hago viejo en tu ausencia,
me da vida la esperanza, el deseo,
el simple acto de pensar, de soñar
que algún día volverás a sentarte junto a mí,
en esta plaza con olor a caramelo.

Todos los derechos reservados.

Comentarios & Opiniones

Penelope

Amigo Moisés, Pinocho siempre llenará nuestros corazones a lo largo de los años, yo también tengo una obra dedicada a él que publiqué no hace mucho y se llama así "Pinocho", quizás le guste leerla! Un abrazo y siempre es un placer leerle!

Critica: 
A. Moisés Durán

Por supuesto que voy a leerla. Lo harè con placer.
un abrazo.

Critica: 
Penelope

Muchísimas gracias amigo!

Critica: