BADALAK EL CUSTODIO DE LA ROCA QUE HACE FUERZA CONTRA EL RÍO

Sobre aquella roca que hace fuerza contra el rio, de pronto el silencio fue roto por una melodía de algo que no era un instrumento, si no la melódica voz de alguien. Al principio trató de ignorarlo, luego esa melodía invadió todo su cuerpo, y le llegó hasta su alma, voltio la vista y sus oídos buscaron el origen de aquella melodía, hasta dar con una silueta en la orilla del rio, perteneciente a una joven mujer de cabellos más oscuros que la noche, y ojos más dulces que la miel. Dejó de lado por un instante su motivo de existir, la custodia de su roca. No tuvo que hacer el primer movimiento, la joven mujer fue quien le habló primero y le preguntó _¿Qué es lo que hacía sobre esa roca todo el tiempo, si no le aburria estar custodiando algo que esta inmóvil? Él la observó con aquellos ojos rojos profundos, sin saber que responder a una pregunta inesperada, y fue que por varios días la joven volvía al rio buscando conversación, haciendo preguntas que hacían cuestionar su esencia misma, después de varias ocasiones el decidido responderle, y fue que así se creó una relación de amistad. La joven en cuestión lo animaba a que abandonase aquella roca y que conozca algo más del mundo, que el mundo era mucho más que el rio y la roca.
¿Abandonar la roca, abandonar el rio? Abandonar el oficio de custodio que ha tenido durante generaciones, era algo impensable hasta ese momento. Pero al mismo tiempo algo estaba naciendo y haciéndose fuerte en su corazón con respecto a la joven, que no siendo de su especie, le resultaba muy atrayente, tanto así que tuvo la idea de limar sus garras contra la roca, para así no poder lastimarla al tocarla, al mismo tiempo también limó sus colmillos contra los acantilados para no lastimarla al besarla. Tomó la decisión de abandonar por breves momentos su roca llamándola sobre sus hombros en gigantes y membranosas alas, aprovechaban el atardecer en los acantilados allí en donde solo algunas aves llegan.
sin perder de vista su roca, para luego regresar.
Así llevaron algún tiempo, hasta que, en una conversación, la joven le propone ir más lejos a un lugar en donde ella le mostraría lo bello del mundo más allá de lo imaginable. Él lo dudó por un instante, pero el amor es mas grande que la duda y desconfianza. Luego de unos pocos preparativos salieron volando algunos kilómetros lejos de allí. Llegaron a un páramo algo extraño de escaza vegetación y árboles muertos, parte de él estaba desorientado y parte de él sabia que algo estaba mal muy mal, la joven lo miró con una mirada distinta a la de siempre, con una sonrisa tan ajena a su rostro.
Badalak, alzó vuelo para regresar a su roca a toda prisa, era un par de horas de vuelo de retorno, al llegar a su destino pudo ver que la roca había sido removida del rio, y al lado de la orilla quedaban fragmentos trozados de la roca que juró custodiar, todo había sido un engaño, para destruir la roca y saquear lo que dentro de ella poseía. Regreso a toda prisa al páramo, solo para encontrar a la joven en brazos de otros hombres, los cuales le atacaron con espadas y dagas, ataques que repelió con facilidad, pero el ataque certero de un puñal clavado en su espalda por una joven que solía amar, fue lo que terminó por minar su alma. Badalak tomó la decisión de tomar vuelo hacia la única otra roca que le daría consuelo, así fue que llegó volando hasta la luna y allí espero por un tiempo. Cicatrizadas las heridas de su cuerpo, regresó al rio en dónde había estado la roca y pudo ver que en el lugar ahora existía un torbellino, que hacía fuerza con el rio. Entonces se posó sobre el torbellino y juró ser el custodio del torbellino que hace fuerza con el rio.
Comentarios & Opiniones
Que fantástico relato, me ha encantado la historia, me deja una enseñanza.. En la confianza está el peligro, no todo lo que brilla es oro, un amor fingido puede llevar a la perdición... Un gusto la visita César, Feliz noche por Perú, abrazo cordial.
Saludos. Su historia combina con maestría el simbolismo del amor, la traición y la resiliencia. Es una obra fascinante que deja una impresión duradera. Abrazo cordial y feliz día.
una sonrisa tan ajena a su rostro.
Maravillosa manera de figurar la ausencia.
Una historia fantástica que cautiva con misterio.
Es un gusto leerle siempre.