El viaje sin regreso

poema de Dositeo

Viajo en un bus, triste y solitario
sin tener un rumbo determinado.

La noche se convierte
en doncella nocturna
donde me invita a observar
como danza junto al dios de la oscuridad.

Aquel que domina el segundo cielo,
aquel que tiene el mundo en sus manos,
el cual lo hace un paraíso oscuro y abstracto.

El bus seguía viajando
y de pronto hace una parada
en un hospital abandonado; un sitio muy extraño.

No había nadie desde hace muchos años
es por eso que me preguntaba a cada momento
por qué éste se había estacionado...

Entonces me puse a contemplar
la entrada principal, que en un abrir y cerrar de ojos
repentinamente aparecían enfermos
el cual ya habían muerto, quedándose atrapados
en ese sitio por el motivo de que nadie los había velado.

Querían irse de aquel hospital,
querían descansar.
Es ahí que al bus deciden entrar,
para viajar a un lugar sin retorno, sin regreso,
un lugar de reposo eterno.

Cuando de repente un enfermo
se sienta a mi lado, el cual lo miro con cuidado.

Lucía muy pálido y olía a alcohol esterilizado,
sus ojos estaban hinchados,
sus pupilas eran de color blanco.

Algo estaba pasando,
la carretera era iluminada de luces violetas
cuyo bus se aproximaba
hacia una misteriosa cordillera.

Montañas elanzadas entre sí
donde el camino sin fin era la figura
de una serpiente enrollada.

No sabía dónde estaba
y cuál era la próxima parada…

El viaje me perturbaba,
la luna y el sol estaban de ambos lados
que el fin de los tiempos se estaba aproximando.

–¡Queremos descansar! ¡Líbranos de todo mal!
¡Por favor! No nos conviertas en estatua de sal–.

¿Estatua de sal? Fueron las palabras
de aquel enfermo demencial
que no dejaba de clamar.

Decidí volver a preguntar:
¿Estatua de sal? Y me respondió:

–Si… Es la maldición por haber sido
infectados por un virus mortal.
Nuestro pueblo fue devastado
por una peste mortífera
que exterminó con nuestra
humanidad por no obedecer
los designios del amo de la oscuridad–.

¿Cuál fueron esos designios?

–Proteger a los indefensos,
ayudar a los enfermos,
no aprovecharse de los ingenuos
pero nunca obedecimos,
jamás cumplimos.
es por eso que nos dirigimos
a la cumbre de lo desconocido
para pagar nuestro castigo–.

El bus hace su última parada
en la cima de una montaña
donde nubes negras gobernaban
y árboles muertos acechaban.

¡Árboles muertos!
Por todas partes nos invadieron
cuyos pasos hacían temblar los suelos,
transformándose en ágiles
y bellas doncellas de ultratumba
con piel marrón y verdoso,
ramas enredadas entre sus largas
y sedosas cabelleras
convirtiéndose en masas retorcidas
de espinos y zarzas,
cuyo rostro distorsionado
se reflejaba en una máscara
de aspecto salvaje y espantoso.

A los pobres enfermos los devoraban
pero como ya estaban muertos
su sufrimiento no acababa.

Me dio tanta pena que decidí defenderlos.

Bajé de aquel transporte
y acudí a la noche,
la doncella nocturna,
aquella diosa, esposa de la oscuridad
ama y señora de la inmortalidad.

Le dije hazme un ángel
para cumplir con el clamor
de aquellos que se arrepintieron
y sólo imploran descansar.

Mi deseo fue concedido
que al sentirme un ángel de justicia
desenvainé mi espada afilada,
brillante de luz amarilla
que me sirvió para despedazar
a estas criaturas malignas.

Cuando hay perdón la pena desaparece
ya que el arrepentimiento
es la cura para el sufrimiento y dolor.

Los muertos por fin descansaron
pero mi viaje no tiene regreso
porque debo seguir cumpliendo mis anhelos.

Comentarios & Opiniones

JOSE FLANDEZ

Excelentes versos cargados de bellas metáforas y profundos sentimientos. Recibe un fraternal saludo y todas las estrellas para tu hermoso poema, estimado Dositeo. Un fraternal abrazo.

Critica: 
Dositeo

Gracias José Flandez por tu excelente comentario. Abrazos amigo poeta.

Critica: 
JJM

Un paraíso abstracto, como tu magistral versar, saludos poeta.

Critica: 
Dositeo

JJM,gracias por tu comentafio saludos poeta.

Critica: 
María del Rocío

Me encantó, es precioso siempre ofreces algo bello en tus letras amigo mío!

Critica: 
Dositeo

Gracias Rocio por hermoso comentario..

Critica: 
UNA HEMBRA

Excelente será un placer visitar aua letras.

Critica: