Fijación Oral
Desde la tierra y su olor mustio
sus hojas se envuelven finamente
en su sudario blanco saborizado
para acabar en esbeltez ósea.
O liadas en nudos entre los dedos
se depositan como pestañas dormilonas
al fondo del matraz esperando el calor
del acto alquímico del alma en el pecho.
Con un chasquido vive la llama,
acaricia con sus lenguas la punta
para consumirla abrumadora
y el vacío absorbe impetuoso el fuego.
Abriéndose paso entre las hebras
se manifiesta la cascada blanca, etérea,
arremolinada en un largo suspiro
desprendido en un pequeño éxtasis.
E invade un calor antiguo al cuerpo,
calor de noches frente al fuego tribal,
de la figura paterna que narra el mundo
y las pieles curtidas que protegen.
Y surge la ensoñación calmada del cielo,
los amplios atardeceres de pájaros nubosos
y el sabor amargo en la lengua seca
y el consuelo de estar reflexionando.
Comentarios & Opiniones
Un gusto pasar Caosophia. Saludos.
interesante poema con oníricas metaforas
Gran placee causa tan grandiosa pluma. Saludos
Saludos cordiales con mi respeto y amistad: Su obra es de alto simbolismo, prudente, juiciosa, con elementos morfo-sintácticos agradables y certeros. El tema es complejo y multidimensional. Felicitaciones y mis buenos deseos para usted.
obra muy bella, un placer leerte, felicitaciones, saludos
Fantástico compañero