El mar (5)

El mar (5)

El mar, de su boca prisionero,
de su distancia anegado contra el mar,
empalizada, ya vuelta en lo rastrero
en otra sombra de nieve, otro lugar…
Boca del mar, prisionero de su boca,
en otra isla de bruma contra el estro,
en otra fábula de goces, otra roca
que el amor pierde, contra el beso nuestro…

Boca de mar, que el suspiro de su gota,
en otra sílaba, su rostro, al palpitar
contra la ola del mar, contra la bota,
su amor oprobia su cisnero al crepitar…
Boca del mar, prisionero de sí mismo
caduco agota de sus fauces un abismo,
que el amor duele, y ya bálsamo que flota,
es la cadencia del ocio que rebota…

El agua, contra el agua que decrece,
simultánea tez, barniz que lava,
pretérito que vuelve lo que mece:
de su futuro, el presente brava…
Por el sendero del mar, que el amor prueba,
junto a la cumbre del vals, otro renuevo:
ó junto al arte de su sombra donde llevo
ó ya el vaivén de la ola que subleva…

Otro mirar, otra cumbre poderosa,
otra distancia en su luz, otro llanero
del mar empedernido por esmero,
el otro mar, el mar que es prosa…
El mar que es prosa y verso, y vitupera
el mar, que ya adusto no requiera,
otras fauces de amor a la primera,
otros vándalos de amor de amor de cera…

Distante y trémulo rumiar, junto a la pena,
el mismo mar, ardor, que ya en la arena,
es otra ciega alcurnia, no regresa,
ya vuelto océano en su buque, otra duquesa…
El mismo entrante mar, el mismo sueño,
dorado empeña de su ardor, otra quimera,
el otro plectro audaz, de amor, cualquiera
en otra sombra igual, de amor decenio…

El otro vándalo de cruz, de amor en glosa
suspiro en otro mar, de mar rotundo,
junto a la luz del mar, del mar profundo
del oeste al este de éste mar, que me alboroza…
El otro espectro de la sal, que vitupera,
con la privanza oriunda de la cal, esbirro
en otra sombra de este mar, con el que espera,
la luz de otro caudal, de amor bizarro…

Es otro ciego mar, el mar pelëa,
en el suspiro gualdo del mar, que me ajetrea,
con el contino veloz, el mar espurio,
con el glaseado de su sombra en otra testa,
el mar apresta su júbilo corsario,
del mar que vuelve de su mar, contra su resta,
en otro vándalo lunar que me amonesta,
tan sólo ciego, doble mar, del mar en cresta…

El mar, el mar que ciega tantos soles,
contra las aguas transparentes de su ansia,
el mar, el mar azul, de prisa que no escancia
ya no la luz del imán de oros endebles…
Ya no lascivo del mar, del mar si tiembles,
contra el ornato de la sal, estrecha cosa,
vituperando el mar, desnudo puebles,
ya no cisternas del júbilo que es glosa…

Si mar, de su trance, no besaba,
dos alientos de bocas, hermanaba…