Amando a una estatua

Amando a una estatua

(Octavos, y octavas reales)

Cual rey, de las manzanas todas, frías,
mi arte es bello amar, rocas airadas
por el suspiro frío, expelen mías,
las ultimadas coplas de tus bodas…
Si pregunta en la roca, prisionera
no del arte, suspiro se avasalla,
si contiende en mi boca zalamera,
de tu goce esperara la batalla…

Pregunta prisionera de murallas,
en que el verso de tu hombro no macilla
cual estigma airado por doquiera
de mi sorda altivez, sobre presilla,
contestando el albogue, el viento chilla
para verse en mejilla lisonjera
ó del arte, tu escoplo en la vidriera
tomada por doquier, imprime albura,

Cual constancia, la helada contra el viento
apacible si mar, ociosa cumbre:
cual rosa pétrea de amor, mi sustento
otra sombra viril que vive en lumbre,
cual astro merodea su elemento,
en otro rostro ciego no descubre
el verso que solombra el instrumento
cual sueño despertara del aliento…

Ó si mi verso entona de tus labios
pregunta encarcelada con un beso,
cual verso trovador tus labios sabios,
ó en oro ó en amor al que regreso
sitiando tu ciudad, estima el arte,
del goce que tu amor trova albedrío
por preguntar tus labios, si en el frío
no se nublase el mar, que fue soñarte…

Ah, cantil nevando, si soliloquio
herido de tu amor, destella canto,
en otro mudo amor desde tu obsequio,
por si trenzara viento, tu quebranto
ó cual sólo dolor, en ti, coloquio,
si de heraldo, nudo no desplanto
al arte souvenir, de tu princesa,
cual sombra en el amor, a ti regresa…

Sin mis caricias vanas, no del arte,
a tu jocoso asilo, la imprudencia
de amarte, roca, si de amar, pudiera,
ya sostener el alma de tu peso
-fragancia que auscultara mi cerezo-
ó cual mellara forma, en ti soñada,
si por el arte nuevo me afirmara
hasta besar tus labios, te adueñara…

Ya goce ó heroísmo en tu vanguardia,
sin el aplomo lerdo, tu hermosura
ó cual tu vida escondo, de manera
que helarte en mi mudez asilo invoca,
ó la tarea imprime de tus labios
ya sinestesia armada de tu canto,
ebúrneo, si el tamiz de tu arte, sombra
solombra aguza, mortal, tu filo

Cual declamado arte de tus pechos,
en el sordo contraste que ilumina,
el sueño de tu sombra que germina
iluminada amante, febril premio…
Ó gozas, si el estío te atropella
Ooh, vaga, enuncias siempre el arte,
de tronador despecho el alma muere,
ó si consigna helada, no provocas…

Cual arte más sombrío de tus penas,
el aire bebe el viento, tus arenas…