No me alcanzas

*Este poema fue escrito en un rollo de papel de 1.60 m de largo, razón por la longitud del poema.

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Me inundo la cabeza de ella
mis libros, lecturas, leer,
rutina, bañarme, en cama,
quedo en cama,
no puedo,
mis cosas detenidas en el tiempo,
el tiempo, no me alcanzas seis horas
no me alcanzas cinco días
no me alcanzas solo mirarte,
desearte los labios
pegados a los míos y
que dure poco,
poquísimo
no sé,
tan poco como un lustro,
una vejez,
un sin fin,
que dure vida
que dure muerte,
desearle los labios,
mis manos y su cintura,
sus manos y mi barba,
tu amor y mi melancolía,
su amor y mis deseos.
¡Taquicardia!
Cuando acerco mis latidos a los suyos...
a los tuyos,
ella
que no deja ni un segundo
la mente del maldito que la desea
y solo desea callarse con sus besos
y te quiero,
te quise,
te voy a querer
como te quiero ahora
con ganas de besos,
de gritarte
te quiero conmigo
con todo,
toda tú,
no lo hagas: ¡Lo haré!
Cómo me duele el corazón
por sus latidos resonantes
que estriban sobre deseos
¡Deseos!
y más deseos.
Te siento, te duermo,
taquicardia,
solo tú,
ella,
solo ella
causa poemas con tanto latir,
sentimiento,
un impulso ha hecho que te escriba,
un impulso ha hecho que te quiera.
No me alcanzas un poema.
ni una antología.
No me alcanzas una vida.
No me alcanzas un te quiero.
No me alcanzas un papel
el sentimiento no es longitud del poema,
no es este.
Te veo y no te llego,
te hablo... y este tampoco llega,
espero que el quererte sí,
lo sé, sí, ojalá, quizás,
espero, solo espero,
me alegro
como todas las cosas difíciles
y no se alcanzan,
yo,
otra vez tú, hasta pensando en ti
te pienso, es raro,
sueños inmersos de ti,
no quiero escribirte
escribo que la quiero
y que ¡poesía, hazte realidad!
Soy contigo lo mucho, lo todo,
inhóspito corazón,
siento los impulsos
no sé si eléctricos,
pero ¡cómo te quiero!
quiero parar...
¡basta de escribir!
el papel se acaba,
pero lo que te siento, no,
y no se acaba,
ni mi inspiración.
Poiesis, creación,
el no ser al ser,
tú, yo, nosotros,
nada me distrae de ti,
la mente es tan vasta
¡y no!
no me cabes,
me desbordas,
me rebalsas,
me embelesas
con tu meliflua voz,
meliflua sonrisa,
¡mierda! tus labios
¡los deseo!
y que peguen,
peguen,
peguen a mi amor,
manos, caricias,
¿por qué no me tocas?
Yo atrás de ti sentado,
o adelante,
o distante,
y quisiera contradecir toda ley
que me diga que un cuerpo
no puede ocupar
el mismo espacio que otro,
tú ocupas todo mi espacio,
eres yo,
y yo no quiero contigo,
yo quiero ser tú,
ser todo
con todo mi ser,
ser y hacer,
hacerte feliz,
más,
cada día más,
pidiendo, ya contigo,
un día más a la sombra,
que te quiero más horas.
La penumbra cae sobre las calles
y este maldito con su cigarro
piensa cada paso en ti
bajo la lluvia está ella,
te veo, ella: tú
alucino que estás en frente
y él corre,
él: yo
corre hacia ella,
espejismo,
¡carajo!
estás y no estás,
en mi mente
y no en mi amor,
caminamos, sentados
en un parque,
un sábado sin plenilunio,
el primer poema de muchos,
el primer sentimiento de muchos,
la luna, invisible, pero está,
¡siempre estará!
estaré
como la espera al fin de año
o a sacarse la lotería,
o al éxito,
a viajar,
tan larga la espera,
el sentimiento,
te llegaré, te llego,
la luna, esa que te ve,
envidia que siento de ella,
te ilumina,
yo quizás también lo haré,
miríada de estrellas,
como aquel día
en que tus manos
apretaban cada centímetro de mi piel
que deseaba la tuya
y mis labios cumplieron...
cumplen,
presente, te vivo...
sus sueños,
saborearte los labios,
cumplen sus sueños.
No me alcanzas los sueños,
soy ambicioso,
te quiero toda tú,
ni un labio,
ni una boca,
ni una mano,
ni un cuerpo,
ni un sentimiento,
¿entiendes?
Te quiero aquí
con el maldito
que busca la realidad
en versos,
que se embriaga de deseos...
mis poemas no tienen sentido,
yo no soy poeta,
no sé por qué escribo,
ni por qué te escribo,
como muchas inexplicables cosas,
como el quererte
y ver tu boca, y no sé,
no sé por qué,
pero ya te estoy besando,
te estoy escribiendo,
te estoy queriendo,
estoy contigo,
se me termina la vida,
te veo las canas,
mis y tus manos
reposando sobre el pasto
contemplando las estrellas,
la luna,
felices,
embriagándonos de recuerdos,
entre risas y sonrisas,
te siento irte,
y yo también me voy,
otro beso,
caricia,
te toco, me tocas,
mírame,
me sonrío,
te sonríes,
meliflua,
abrazos,
abrazo,
uno solo,
con todos los te quieros
que no se han dicho,
y otro beso,
se acaba, la vida,
sobre el pasto,
¡qué felices ambos!
con un beso...
último.
Despierto...