La película

El cine siempre me ha gustado.
Son horas llenas de puro encanto
Para relajarse y ser motivado
Por historias que evocan llanto.

Romance, acción o ciencia ficción,
Los martes o saliendo de institución,
Cualquier escenario es buena razón
Para disfrutar de esta atracción.

Pero hay películas desagradables,
Esas que te hacen llorar los mares,
Porque no puedes evitar preguntarte,
“¿Qué será de mí, sin poder amarte?”.

Hay películas que te ponen tenso;
Olvida el terror, a eso no me refiero.
Películas que, tras un acto intenso,
Aplican el temor a perder lo que quiero.

Te identificas con el personaje,
Lleno de errores y debilidades,
Que lucha siempre por superarse,
Y que muere por besar a su amante.

Esta película que vivo yo cada día
Es la vesícula que guardo en vida.
Esta peli dura lo que sana mi herida,
Es la tesis chula de la historia mía.

Y sin importar que haya palomitas,
No dejo de preocuparme por ti.
Me mata pensar que sea el clímax
De nuestra relación que llega a su fin.

El público se levanta con las luces,
Cuales criminales pillados huyen.
El único que por escaleras no sube
Soy yo, que el final me consume.

Y tú, a mi derecha desde el principio,
Mi compañera desde que coincidimos,
Me miras con tristeza y un suspiro,
Anhelando corregir todo desde el inicio.

Por favor, quédate conmigo, a mi lado,
Veamos los créditos aquí sentados,
Tomémonos fuertemente de las manos,
Y abrázame, que no puedo ser calmado.